¿Donde estás justicia?, te busco,
camino entre la selva de cemento y huyes,
escapas sin parar del asco,
para mirar sin ver todo lo que es.
Te busco en las togas negras y en ese loco,
desaforado recorrer de los seres
hacia otro mundo que no sea tan parco,
tan demente como hoy lo eres.
Pero escapas del cerco,
de la alambrada humana de las leyes
para imponer el castigo a inocentes hombres,
los que pretenden hacer ver lo que es...
¿Dónde estás justicia?, por esos niños en ese cerco,
el de la miseria y la indigencia a mares;
por esos jóvenes, sin futuro ni otro alegre marco,
que siguen viviendo en números impares...
¿Dónde estás justicia?, por esas mujeres que, en lo terco,
luchan por su vida en batallas siderales;
por la de sus hijos, a pesar de lo trágico
y por la de sus nietos, ante las imposiciones brutales...
¿Dónde estás justicia?, por quienes tienen poco,
en la salud y en lo material, a cuesta de ricos a raudales,
que necesitan de tu brazo fuerte en este barco,
que algunos llaman mundo, para seguir como mortales...
¿Dónde estás justicia?, te has ido pero te busco
y te voy a encontrar, aunque sea en esos arrabales,
los de la marcha y la protesta, para ese embarco
que, aún hoy, nos lleve algún día a ser iguales...
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