Así como comencé la tercera temporada de Incluyendo, se terminó demasiado rápido. Causas hay muchas, como siempre… Algunas fueron provocadas por mi propio ser consecuente y otras, por las limitaciones propias y ajenas que suelen ocurrir en los medios alternativos.
Sin embargo, y más allá de mi alejamiento de Barricada TV, lo importante es lo que quedó plasmado en esos dos años del programa en donde pude reflejar algunas de las tantas problemáticas que giran en torno a la discapacidad.
Algunas y algunos me han preguntado acerca del futuro. Pues, no lo sé. Habrá que ver que dispara el destino, como decía Fidel Pintos.
No obstante, cabe el profundo agradecimiento a las y los compañeros del canal 5 de Almagro por lo brindado porque fue una experiencia maravillosa mientras duró. Y cabe destacar que fue el primer medio alternativo, comunitario y popular que se ocupó y preocupó por las personas con discapacidad cuando nadie quería hacer nada al respecto.
Sigo caminando. Buscando mi destino. En la misma ruta que me autoimpuse hace 10 años: la búsqueda de la memoria, la verdad y la justicia. No es poca cosa en tiempos donde pareciera que vuelve aquel latiguillo “Señora, señor, a la derecha de su pantalla”.
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